miércoles, 8 de enero de 2014

LA ENERGÍA: UN RETO PARA EUROPA

Este año estamos en año electoral, el de las elecciones europeas de mayo. En estas elecciones nos jugamos mucho más de lo que parece, pues desde Bruselas se diseñan las políticas que nos afectan en el día a día, más allá de las normas de etiquetado o la homologación de los sistemas de frenado en los vehículos a motor, por poner dos ejemplos. Las directivas europeas, de obligado cumplimiento por parte de los países miembros de la UE, marcan las legislaciones nacionales en ámbitos tan dispares como la pesca, el turismo, la industria o el medio ambiente.

Uno de los aspectos cruciales que se tratan en la UE es el de la política energética. La base de la estrategia energética europea es la llamada "Energía 2020: Estrategia para una energía competitiva, sostenible y segura". En ella se incluye el Plan 20/20/20, que pretende ahorrar, en el horizonte de 2020, un 20% de energía, que el 20% de la energía total sea de origen renovable y que se mejore en un 20% la eficiencia energética. En Europa existe, además, el llamado SET Plan (Plan para el Desarrollo de Tecnologías Estratégicas en el campo de la Energía), que incluye medidas relativas a la planificación, implementación, aplicación de recursos y coordinación en materia de tecnología energética. En un plazo más largo, desde la UE se pretende una reducción de emisiones internas de CO2 del orden del 40% y del 60% respecto a los niveles de 1990 de aquí a 2030 y 2040, respectivamente, llegando a una reducción del 80% en 2050. Y para ello España no debe abandonar la senda del desarrollo de las energías renovables, pero el camino emprendido por el ministro Soria va en dirección contraria.

España ha llegado a ser una de las potencias europeas en el campo de las energías renovables, ya que el conjunto de las centrales termosolares instaladas en nuestro país hasta 2012 suponían el 72,85% de toda la potencia instalada en el planeta. Asimismo, la tecnología termosolar desarrollada por los centros de investigación y empresas españolas están presentes en más del 60% de las centrales en construcción en países como Estados Unidos, India, Emiratos Árabes, México... Sin embargo, las medidas tomadas por el gobierno de Rajoy han dado al traste con muchas de las inversiones realizadas en este campo, castigando precisamente a las energías renovables, culpándolas del llamado "déficit de tarifa", y a los consumidores, haciéndonos cargar con subidas indiscriminadas en las tarifas. A pesar de ello, las energías renovables van teniendo cada vez más presencia en el mix energético, llegando a cubrir en diciembre pasado el 36,8% del total de la electricidad producida. Además de esto, en 2013, el conjunto de las energías renovables representaron el 26,1% de la generación eléctrica en nuestro país, de las cuales la termosolar ya representa el 1,8%, la fotovoltaica el 3,1% y la eólica el 21,2%.

A nivel continental, Europa gasta anualmente más de 400 mil millones de euros en importar combustibles fósiles (1.100 millones de euros al día), una factura que ha crecido en 200.000 millones en los últimos tres años debido al aumento del precio del petróleo. De esa cantidad, España gasta 45.000 millones al año. A pesar de la culpabilización a las energías renovables con que desde los medios afines al gobierno se nos bombardea, lo cierto es que la Unión Europea ahorró 5.700 millones en 2010 debido al uso de la energía eólica. Según la EWEA (siglas en inglés de la Asociación Europea de la Energía Eólica), para 2020 se podría ahorrar hasta 25.000 millones con el desarrollo de este tipo de energía.

La pobreza energética, situación cada vez más común en Europa y, sobre todo, en España, donde más de 4 millones de personas se ven incapaces de pagar la factura de la luz, ha obligado a muchos países europeos a tomar medidas de urgencia como el de evitar los cortes de la luz a las familias que no puedan pagar, al menos durante los meses más fríos. Sin embargo, el PP bloqueó el pasado mes de diciembre esta iniciativa, demostrando así que defiende una vez más los intereses de las grandes compañías eléctricas antes que el bienestar de los ciudadanos.

Sólo con la transición energética hacia el uso masivo de fuentes renovables de energía se conseguirá en Europa la independencia energética, asunto totalmente imprescindible por las previsiones de aumento del precio del petróleo, debido a la mayor dificultad de obtenerlo en el futuro, así como por el aumento de la demanda por parte de los países emergentes. Por ello se hace necesaria la aprobación de una planificación energética que tenga como eje central el cumplimiento de unos objetivos ambiciosos de reducción de emisiones, desarrollo de las renovables e incremento de la eficiencia, siempre vinculados entre Europa, tal y como proponen EQUO y la Fundación Renovables en las conclusiones de la jornada sobre "Energía Limpia para una Europa Sostenible", celebrada el verano pasado. 


1 comentario:

  1. Las energías renovables aportaron 8.000 millones de euros al año de beneficio neto en el uso de electricidad en hogares y servicios entre 1998 y 2008, mayor que el apoyo público que recibieron:

    http://esmateria.com/2012/08/22/las-energias-renovables-ahorran-a-europa-mas-dinero-del-que-reciben/


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