miércoles, 6 de mayo de 2015

CONSUME HASTA MORIR


Vuelven las declaraciones triunfalistas referidas al cambio de tendencia en el consumo de los españoles, con un aumento en la compra de ropa, coches y en la firma de hipotecas. Desde el Gobierno se apela a la compra masiva de bienes como única solución a la crisis, con la complicidad de los medios de comunicación oficiales, en un intento de animar a la gente a que se lance a la calle a quemar las tarjetas de crédito. Se recuerda con nostalgia las cifras de consumo de la década pasada, cuando se alcanzaron más de un 1.300.000 créditos hipotecarios en 2006, en el momento álgido de la burbuja inmobiliaria, mientras se lamentan de que las cifras de 2014 apenas superen las 200.000 hipotecas. La patronal del sector textil Acotex anuncia a bombo y platillo que las ventas han aumentado en un 4% en 2014, al tiempo que se espera que en España se vendan más de un millón de automóviles en 2015. La patronal de la construcción da por finiquitada la crisis por el repunte del sector del ladrillo, opinión compartida por el Banco de España, que pronostica la recuperación de ese sector en los próximos meses, al tiempo que se felicita por el aumento de los visados en obra nueva.
Pero ninguna de estas declaraciones de intenciones tiene en cuenta que nada será igual a la época de antes de la crisis, allá por 2005 y que, por tanto, no se pueden aplicar las mismas soluciones a los problemas que se han ido acentuando en esta década, aunque se quiera ignorar. Desde la entrada en vigor del Protocolo de Kyoto en 2005, las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) no han hecho más que aumentar (las emisiones de GEI han aumentado en un 45% desde 1990), la presión sobre los ecosistemas se hace intolerable, merced a la especulación sobre el territorio que ha sido moneda corriente en estos años, con la multiplicación de infraestructuras (autopistas, vías del AVE, aeropuertos) y urbanizaciones, sobre todo en la costa.
Las presiones de los lobbies en España (de la energía, del automóvil, de las empresas del IBEX-35) sobre los gobiernos, sumado a las de las instituciones financieras internacionales (BCE, FMI, Comisión Europea) impiden que se de una auténtica Transición Ecológica de la Economía, transformando y adaptando el modelo productivo a los retos del siglo XXI, el primero de los cuales es el cambio climático. Ese cambio pasa por la promoción de los llamados empleos verdes, que pueden crear hasta 20 millones de puestos de trabajo de calidad y sostenibles en Europa, dos millones de ellos en España, en sectores como las energías renovables, el agua, el control de la contaminación, el tratamiento de residuos, la agricultura ecológica, la gestión de espacios naturales, los servicios ambientales a las empresas o la educación ambiental, por citar unos cuantos.
Sin embargo, se continúa basando la supuesta recuperación en un modelo obsoleto, con puestos de trabajo de baja cualificación, temporales y precarios, al tiempo que se insta a la sociedad a “consumir hasta morir”, parafraseando el título del conocido documental, como única salida a la crisis. Se sigue con una visión miope y cortoplacista, sin previsión de futuro, un futuro que no pinta muy bien si no se varía el rumbo.

Artículo aparecido ayer en La Crónica del Pajarito:

http://www.lacronicadelpajarito.es/blog/federicogcharton/2015/05/consume-hasta-morir


No hay comentarios:

Publicar un comentario