viernes, 14 de octubre de 2011

HAY SALIDA. EL 15-O SE PUEDE DEMOSTRAR

Estamos en un mundo globalizado en el que está claro que unos pocos dominan (o lo intentan) los destinos de todo el planeta. Comparado con las décadas anteriores, se ha complicado mucho el panorama internacional; antes de la caída del muro de Berlín el mundo se explicaba en términos de dos bloques antagónicos en torno a dos potencias. A partir de la década de los '90, y con el bloque comunista reducido a la mínima expresión, se inicia la era del neoliberalismo extremo, anteriormente aplicado en diversos países (el Chile de Pinochet, la Argentina de las juntas militares, los EE.UU. de la era Reagan, la Gran Bretaña de Thatcher), como bien explica Naomi Klein en su libro La doctrina del Shock, luego llevado al cine (ver película). 

La liberalización de las transacciones financieras, la proliferación de los paraísos fiscales, la imposición de las doctrinas económicas más conservadoras a los gobiernos de uno y otro signo, han aumentado escandalosamente la brecha entre ricos y pobres, tanto si comparamos entre países del Norte y del Sur, como si hablamos de la población de un mismo país. La facilidad con que los capitales viajan de un país a otro contrasta con las dificultades que tienen las personas para moverse, incluso huyendo de conflictos bélicos, dictaduras, hambrunas o condiciones climáticas extremas. Algunos datos: 


- El 50 % de los habitantes del planeta viven con menos de 2,5 $ al día (ver enlace).
- El aumento del precio de los alimentos básicos por culpa de la especulación ha llevado a la pobreza a 44 millones de personas en el mundo en el último año (ver enlace).
- En España, casi el 21 % de la población está por debajo del umbral de la pobreza  (ver enlace).


Las economías de los principales países industrializados del mundo, en la vía del neoliberalismo salvaje, están acentuando esta situación: profundización de las diferencias entre ricos y pobres; predomino de la economía financiera frente a la economía real; obediencia ciega de los gobiernos a las consignas y recetas del FMI, Banco Mundial, Bancos Centrales; pérdida de peso específico del sector público frente al privado, con la consiguiente merma de la calidad, pues se prima la rentabilidad antes que la garantía de los servicios. 


Uno de los más perjudicado ante el avance del neoliberalismo es el medio ambiente, pues para los mercados, no es más que una fuente de recursos a corto plazo, sin importar las consecuencias que sus acciones puedan suponer para las generaciones futuras: pérdida de la biodiversidad (ver enlace); destrucción de hábitats debido a actividades antropogénicas y al cambio climático (ver enlace); aumento de las emisiones de CO2 con el subsiguiente calentamiento global (ver enlace); desplazamientos forzosos de poblaciones enteras, por la deforestación, el agotamiento de los recursos o los conflictos.


Frente a la deriva de los gobiernos de la UE (capitaneados por Alemania y Francia) y de EE.UU.; frente al "dejar hacer" que ha sido el leit motiv de la última década, con las consecuencias por tod@s sabidas del aumento desmesurado de las deudas soberanas, de la inyección de capital público a los bancos que son, en primera instancia, los principales responsables de la actual crisis; frente al déficit democrático -por mucho que lo niegue el establishment-, mañana 15 de octubre tenemos la oportunidad de decirle a los que  manejan los hilos que ya está bien, que queremos otra forma de hacer las cosas, más participativa, más democrática, en la que l@s ciudadan@s podamos influir de verdad y no cada 4 años. Esta marcha, auspiciada por los indignados españoles, ha movilizado a más de 800 ciudades de 70 países, bajo el lema "Unidos para un Cambio Global".


MAÑANA A LAS 20 H. EN JARDÍN DE FLORIDABLANCA DE MURCIA, MANIFIÉSTATE.

No hay comentarios:

Publicar un comentario